domingo, 8 de febrero de 2015

Lady Whirlwind (1972)

Año 1970 , Raymond Chow crea Golden Harvest y nada más empezar se saca de la manga una genial jugada, Angela Mao Ying. Aprovechando la estela dejada por su alma máter Shaw Brothers, como si de un carroñero se tratara (con todo el cariño), Raymond recluta de la plantilla de SB de entre muchos otros profesionales a Huang Feng (Naked comes the Huntress) , guionista y director con el que Angela Mao colaboraría en numerosas ocasiones. Las intenciones de Raymond no eran únicamente las de rodearse de un equipo que ya conocía, si no que además quería jugar sobre seguro ofreciendo a un publico acostumbrado a una forma de hacer muy concreta ,algo muy parecido a lo que su celebre competidora había estado produciendo desde hacía más de una decada.
Lady Whirlwind es un claro ejemplo de lo que hablo.
La historia es un triangulo de venganza con japoneses de por medio en el que a pesar de que Mao Ying juega un papel secundario consigue con facilidad llevarse todo el protagonismo con esa combinación tan característica suya de mala leche, excelente técnica y una gran belleza (a partir de esta película se la conocería hasta hoy como Lady Whirlwind). El film se toma muy en serio a si mismo y dispone de una plasticidad y forma similares a los estándares Shawianos (pero sin tanto virtuosismo), el problema reside en que a pesar de contener varias escenas de pelea bastante bien coreografiadas y ejecutadas (a cargo de Sammo Hung), estas son escasas y están aisladas entre sí por extensos bloques de desarrollo argumental algo anodinos y poco fructíferos, ya que, con todo, se olvida de otorgar al personaje de Mao Ying de verosimilitud. A pesar de esto, las más que correctas actuaciones de Chang Yi (The thundering sword) como protagonista, el siempre corrupto Pai Ying (Dragon Gate Inn) encarnando al villano japonés y la desconocida Wu Ching Erh,permiten que la película alcance cotas de dramatismo bastante potentes, sumado al clasicismo formal, la coreografía a doble cuchillo del "solo contra todos" de Chang Yi en el restaurante (un trabajo sobresaliente) y la potencia de Angela Mao, convierten esta película en una experiencia recomendable, aunque inferior a otros títulos de Lady Kung Fu.