Ya se ha escrito y hablado muchísimo de esta película, de
modo que creo que poco es lo que puedo aportar, pero como en un post posterior
quiero comentar la menos conocida El
último combate –Game of Death 2 (1981), creí
oportuno al menos reseñar brevemente esta extrañísima primera parte.
Como muchos ya saben, Game of Death iba a ser en principio
la segunda película que dirigiría Bruce Lee, con producción de Raymond Chow. La
historia en principio era sencilla (resumiendo mucho, un grupo de luchadores se
adentran en una pagoda de varios pisos asediada por diferentes rivales) y el
reparto contaba con nombres tan conocidos como James Tien, Kareem Abdul Jabbar,
Dan Inosanto, George Lazenby y el propio
Lee. El rodaje comenzó sin problemas, pero se vio interrumpido cuando unos
directivos hollywoodienses le ofrecieron a Lee la oportunidad de protagonizar Operación
dragón (1973) una película para la Warner Bros. El problema-disgusto-desgracia
llegó cuando a mediados de 1973 Lee falleció repentinamente, quedando entonces Game
of death inacabada.
Años después, el
productor Raymond Chow decidió que aquella película de Lee debía ser terminada,
de modo que inició una de las pre-producciones más locas que se conocen en la
historia del cine. Ignorando por completo el guión original de Lee, Chow creyó
que lo mejor era realizar una película de acción al estilo Hollywood, con
persecuciones, tiroteos, explosiones y todas esas cosas. De ese modo contrató a
Robert Clouse (director de Operación dragón entre muchas otras)
para que escribiera un guión acorde con la nueva propuesta y que se encargara
de dirigir la película. Se confeccionó, de ese modo, un reparto en principio
más comercial que incluía las presencias de los oscarizados Gig Young y Dean
Jagger, pero también la de Bob Wall (un habitual en la filmografía de Lee). El
principal problema fue la, evidente, ausencia de Bruce Lee, por lo que se
recurrió al uso de varios dobles (entre ellos Yuen Biao), insertos de planos de
sus anteriores películas (doblando los diálogos ajustándolos al nuevo guión) y
mil y un trucos más que intentaron disimular la falta de Lee. Evidentemente no lo consiguieron.
La trama es la siguiente: Billy Lo es un actor de cine muy taquillero
que es acosado por la mafia día sí día también. Durante una jornada de
filmación recibe un disparo por parte de un criminal. Todo el planeta (pues se
trata de una súper-estrella) cree que ha muerto, pero en realidad, Billy finge
su muerte para acabar por sorpresa con la banda de mafiosos. Como el lector observará, nada que ver con la
aventura existencial iniciada en el guión original de Bruce Lee, pero aún así,
Chow, Clouse y el resto se las ingeniaron para poder introducir en el guión
algunas escenas ya rodadas por Lee, siendo aquellos los mejores momentos del
filme.
Los de producción tantearon a diferentes personalidades para
que realizasen algún papel en la película. Kareem Abdul Jabbar y Chuck Norris,
por ejemplo, le dijeron a Chow y los suyos (imagino que amablemente) que se
fueran a la puta mierda, pues claramente veían que se trataba de un producto
confeccionado para explotar la fama de Lee. Por esa razón sorprende (y mucho)
que artistas como Dan Inosanto, Sammo Hung, Roy Chiao o Yuen Wah sí aceptasen participar
en la película, aunque me gusta pensar que más bien fueron engañados. Y aun
tratándose de un largometraje de tan baja calidad, merece la pena tenerlo en la
colección por tres motivos:
-La película es tan sumamente mala que es imposible no reírse
con ella, convirtiéndose de este modo en lo que los expertos llaman “comedia
involuntaria”.
-Como decíamos, el metraje incluye diferentes escenas que
Bruce Lee logró dirigir en vida, como el combate entre James Tien y Jabbar o la
pelea entre el propio Lee e Inosanto, esta última, con una exhibición del
manejo de los nunchakus por parte de ambos que deja con la boca abierta y que
se convierte, a mi juicio, en uno de los mejores momento de la filmografía de
Lee (y la mejor escena de juego con la muerte sin duda).
- El soundtrack original fue compuesto por el genial John
Barry, otorgando de ese modo cierto toque de calidad.
Finalmente Juego con la muerte se estrenó en
1978 y se convirtió en un éxito de taquilla, pues el público se moría de ganas
de ver una vez más al autentico Bruce Lee en pantalla grande, aún saliendo este
tan solo unos nueve minutos. La secuela no tardó en llegar, y pronto será
analizada en nuestro blog.
Puntuación: 5/10
Puntuación: 5/10
Joder, es que veo la pegatina de la cara de Bruce pegada en el fotograma y se me caen los cojones al suelo. Este sí seria un buen caso para usar la tecnología actual y hacer una reedición de la película solventando todas estas barbaridades. ¿A nadie se le ocurre? ¿Ni por respeto?
ResponderEliminarHombre, te diré una opinión puramente personal: a mi no me gusta nada eso de "reeditar" las pelis añadiendo mejoras, como hicieron con la primera saga de "Star Wars".
ResponderEliminarPuedo entender que se ARREGLEN aspectos estropeados, como el sonido, pero no que mejoren efectos especiales.
"El juego de la muerte" de Robert Clouse es ASÍ, no hay que cambiarlo. Se dió por buena y aprobada en su momento. Viendola así, vemos como se trabajaba en aquella época, que medios tenian, y ahi radica el encanto.Cambiarlo sería como borrar una parte de la historia.
De otro modo, podriamos estar MEJORANDO la gran mayoria de las películas. Yo prefiero que no se cambie nada
Creo que el aspecto final de la primera saga de star wars no fue exactamente el mismo que el de Game of Death, ¿no? xD
ResponderEliminar¡Evidentemente cuando una película es normal a mi tampoco me gusta que añadan nada! pero Game of Death de normal tiene poco. Es mas, Game of Death mas que AÑADIR necesita ARREGLAR. Tampoco digo que se elimine la versión original, si no hacer otra como extra y que cada uno elija. ¿A nadie le molestan las versiones del director no? no se, por lo menos algo digno de ver sin partirte el puto culo.